Tom Girardi ha mantenido un perfil bajo desde que se conoció la noticia de su divorcio y problemas legales. Girardi solo ha sido visto públicamente dos veces, la primera vez en una gasolinera luciendo frágil y con un ojo morado, según informó People. Además, su salud mental lamentablemente ha empeorado. En respuesta, el hermano de Girardi, Robert, solicitó ser su tutor temporal en enero. La petición describió el estado mental de Tom como «lamentablemente deteriorado hasta el punto en que no puede cuidar de sí mismo sin ayuda», según People. Robert fue nombrado su curador permanente en julio.
Girardi, que ahora reside en un centro de vida asistida, fue visto nuevamente en septiembre, esta vez saliendo de un restaurante de Los Ángeles cuando los paparazzi le preguntaron si Erika Jayne sabía o no sobre el escándalo. Él respondió: «Creo que sí», según la página seis. Si bien no se ha presentado evidencia para corroborar esto, su afirmación refuta la postura de Erika de que ella no estuvo involucrada.
Mientras tanto, otras amas de casa han admitido haber oído hablar de los problemas legales de Girardi mucho antes de que se conociera la noticia. Camille Grammer revelada en Gorjeo que escuchó rumores en el baby shower de Andy Cohen en 2019, mientras que Bethenny Frankel llamó a sus problemas financieros el «secreto peor guardado» de Los Ángeles en su podcast, «Just B», y afirmó que Girardi le debía a su ex Dennis Shields $ 500,000, según Page Six. Solo el tiempo dirá si Erika tiene una respuesta a la acusación de su exmarido.