Salma Hayek experimentó un caso casi fatal de COVID-19. En su reciente artículo de portada de Variety, la estrella de «Desperado» reveló que sufrió el virus al principio de la pandemia. Hayek tuvo un diagnóstico grave, pero decidió buscar tratamiento y mantenerse para sí misma en su casa de Londres. «Mi médico me suplicó que fuera al hospital porque estaba muy mal», dijo al medio. «Le dije: ‘No, gracias. Prefiero morir en casa».
Según Variety, «Hayek pasó unas siete semanas aislada en una habitación de la casa. En un momento, le pusieron oxígeno. Todavía no ha recuperado por completo la energía que tenía». Dicho esto, según el medio, desde entonces regresó al trabajo.
Hayek tiene varios proyectos en proceso. No solo interpretará a Ajak en «Eternals» de Marvel, sino que también está mostrando sus dotes de acción en «Hitman’s Wife’s Bodyguard» junto a Ryan Reynolds y Samuel L. Jackson, que es la secuela de «The Hitman’s Bodyguard» de 2017 y es se lanzará en junio de 2021, según la fecha límite. Sin mencionar que Hayek está compartiendo la pantalla grande con Lady Gaga y el actor Adam Driver en la bulliciosa «House of Gucci» de Ridley Scott, que acaba de terminar su producción italiana a principios de mayo, según Harper’s Bazaar. Es bueno que Hayek se haya recuperado de su enfermedad y esté mejor, porque ¿dónde estaría Hollywood sin ella?