El regreso del príncipe Harry a Gran Bretaña para el funeral del príncipe Felipe fue la primera vez que habló cara a cara con su familia desde que dejó sus deberes reales en marzo de 2020. El duque de Sussex regresó durante nueve días, que incluyeron cinco período de cuarentena de días para los protocolos COVID-19. Según lo informado por Omid Scobie, un experto en la realeza con una relación cercana con Harry y Meghan Markle, para Harper’s Bazaar, Harry se quedó en Frogmore Cottage en los terrenos de la reina Isabel II mientras estaba en casa. Durante la estadía de Harry, pudo reunirse con Elizabeth en dos ocasiones distintas. «El amor y respeto que siente por su abuela siempre será inquebrantable», dijo una fuente al medio.
Como lo cubrió The Sun, se vio al duque de Sussex intercambiando palabras amistosas con el príncipe William durante el funeral de Philip. Los hermanos y el príncipe Carlos se reunieron durante un par de horas a puerta cerrada después, pero sus conversaciones no incluyeron la ventilación de los agravios familiares. «Este viaje fue para honrar la vida de su abuelo y apoyar a su abuela y parientes. Fue un período de tiempo muy centrado en la familia», dijo una fuente a Harper’s. «El sábado rompió el hielo para futuras conversaciones, pero los temas pendientes no se han abordado en profundidad».
Había pasado más de un año desde que Harry vio a su hermano y a su padre, pero se espera que regrese al Palacio de Kensington en el verano para la inauguración de la estatua de la princesa Diana el 1 de julio de 2021, según Cosmopolitan.